Hay mucho desconocimiento, mucha ignorancia patente, muchos tópicos, también en torno a nuestra profesión que voy a aprovechar en este blog para desmitificar. Empieza por el error de describir las competencias del personal que imparte la fisioterapia, en este caso yo, el fisioterapeuta.
¡Los fisioterapeutas no solo damos masajes! Quizás esto te haya pillado por sorpresa. Quizás esa es la idea principal que esté en mente de todo el mundo, quizás por utilizarse de recurso en las artes amatorias por algún antiguo colega para conquistar a la gachí de turno, artes amatorias que son aún más viejas que nuestra profesión. Pero nuestras funciones van mucho más allá de lo que puedas imaginar a priori. Lo que esta claro es que esto ya forma parte del grueso de citas célebres: "¿Me das un masaje?" responden casi siempre tras presentarte como fisioterapeuta. Una mala praxis quizás fue el desencadenante del burdo rumor, por suerte estamos a tiempo para enmendarlo, y por aquí empieza mi trabajo.
El Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas (C.G.C.F.) refleja en sus estatutos generales la siguiente definición: La Fisioterapia es la ciencia y el arte del tratamiento físico; es decir, el conjunto de métodos, actuaciones y técnicas que, mediante la aplicación de medios físicos, curan y previenen las enfermedades, promueven la salud, recuperan, habilitan, rehabilitan y readaptan a las personas afectadas de disfunciones psicofísicas o a las que se desea mantener en un nivel adecuado de salud.
El ejercicio de la Fisioterapia incluye, además, la ejecución por el fisioterapeuta, por si mismo o dentro del equipo multidisciplinario, de pruebas eléctricas y manuales destinadas a determinar el grado de afectación de la inervación y la fuerza muscular, pruebas para determinar las capacidades funcionales, la amplitud del movimiento articular y medidas de la capacidad vital, todas ellas enfocadas a la determinación de la valoración y del diagnóstico fisioterápico, como paso previo a cualquier acto fisioterapéutico, así como la utilización de ayudas diagnósticas para el control de la evolución de los usuarios.
El objetivo último de la Fisioterapia es promover, mantener, restablecer y aumentar el nivel de salud de los ciudadanos a fin de mejorar la calidad de vida de la persona y facilitar su reinserción social plena.
Así pues, y resumiendo: Valoración, diagnóstico, tratamiento, mantenimiento y prevención para mejorar la calidad de vida de los pacientes y que puedan desempeñar las actividades de la vida diaria con normalidad y satisfacción plena. Y esto amigos míos es posible no solo con masajes, sino con muchas más técnicas específicas según el problema de cada paciente y que engloban un tratamiento completo, complementándose unas a otras para un resultado óptimo.
Da una oportunidad a tu Fisio, tiene muchas cosas para ti, sobre todo salud y buenos consejos, si tenéis una duda preguntad, no deis nada por hecho.
LA FELICIDAD RADICA, ANTE TODO, EN LA SALUD
Lo has explicado perfectamente, nos ha gustado mucho el post. Me encanta mucho ¡Los fisioterapeutas no solo damos masajes!
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